Se destacan varias diferencias clave entre las estrategias push y pull en la distribución:
Sistemas push en la distribución:
- Impulsados por pronósticos y cronogramas predeterminados. Este enfoque se basa en predecir la demanda futura y planificar la producción y la distribución en consecuencia.
- A menudo se asocia con entornos MTS (Make to Stock). En MTS, los productos se fabrican y almacenan en anticipación a los pedidos de los clientes.
- Se centran en maximizar la eficiencia y la utilización de los recursos. El objetivo es optimizar las corridas de producción, minimizar los costos y mantener niveles de inventario constantes.
- Pueden ser vulnerables a imprecisiones en los pronósticos y cambios en la demanda. Cuando las previsiones son erróneas o la demanda fluctúa, los sistemas push pueden provocar un exceso de inventario, falta de existencias o costosos ajustes.
- Ejemplos: reposición de almacenes en función de decisiones centralizadas con sistemas MRP tradicionales.
Sistemas pull en la distribución:
- Reaccionan a la demanda real de los clientes. La producción y la distribución se activan con los pedidos de los clientes, lo que minimiza el inventario innecesario.
- A menudo se asocia con entornos MTO (fabricación bajo pedido). En MTO, los productos se fabrican solo después de recibir los pedidos de los clientes.
- Priorizan la capacidad de respuesta y la flexibilidad. Los sistemas pull están diseñados para adaptarse a los requisitos cambiantes de los clientes y las fluctuaciones de la demanda.
- Hacen hincapié en los plazos de entrega cortos y la personalización. El enfoque está en cumplir con los pedidos de los clientes de manera rápida y eficiente, a menudo con la capacidad de adaptar los productos a necesidades específicas.
- Pueden ser difíciles de implementar en entornos altamente volátiles. Los sistemas pull se basan en procesos eficientes y en una estrecha colaboración para gestionar las fluctuaciones de la demanda de manera eficaz.
Mejora de los sistemas push y pull en la distribución:
Las estrategias push y pull pueden mejorarse aprovechando las tecnologías modernas y los conocimientos basados en datos:
- IA y análisis de datos: que mejoran la precisión del pronóstico de la demanda en los sistemas push y proporcionan visibilidad en tiempo real de las fluctuaciones de la demanda en los sistemas pull.
- Principios Lean: mejoran la eficiencia y reducen el desperdicio en los sistemas push y pull optimizando los procesos, minimizando los tiempos de cambio y estandarizando el trabajo.
- Colaboración y comunicación: facilitan el intercambio de información y la coordinación entre los socios de la cadena de suministro para mejorar la capacidad de respuesta en los entornos push y pull.
En conclusión, la elección entre un sistema push o pull en la distribución depende de la industria específica, las características del producto y las expectativas del cliente. Al comprender las diferencias fundamentales y aprovechar las herramientas y tecnologías disponibles, las empresas diseñan estrategias de distribución eficientes y receptivas.